Guerra fría, disputa que enfrentó después de 1945 a
Estados Unidos y sus aliados, de un lado, y al grupo de naciones lideradas por
la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), del otro. No se produjo
un conflicto militar directo entre ambas superpotencias, pero surgieron
intensas luchas económicas y diplomáticas. Los distintos intereses condujeron a
una sospecha y hostilidad mutuas enmarcadas en una rivalidad ideológica en
aumento.
Durante el período que duró la Guerra Fría, nunca se produjo un enfrentamiento directo entre las dos superpotencias. Sin embargo, sí hubo múltiples hostilidades locales que se produjeron en Estados subdesarrollados de Asia, África o América Latina, en los que el factor ideológico fue el motor de los conflictos. En estos, tanto Estados Unidos como la Unión Soviética intentaron influir mediante apoyo económico o militar a uno u otro bando.
Durante el período que duró la Guerra Fría, nunca se produjo un enfrentamiento directo entre las dos superpotencias. Sin embargo, sí hubo múltiples hostilidades locales que se produjeron en Estados subdesarrollados de Asia, África o América Latina, en los que el factor ideológico fue el motor de los conflictos. En estos, tanto Estados Unidos como la Unión Soviética intentaron influir mediante apoyo económico o militar a uno u otro bando.
No obstante, también hubo ocasiones en que ambas superpotencias se
vieron directamente involucradas. Si bien estos momentos nunca pasaron a
mayores, sí llevaron a la Guerra Fría a momentos críticos de tensión debido al
riesgo de una guerra nuclear.
Los antecedentes: La división de Alemania
y Berlín en zonas de ocupación
En 1945 los pilotos estadounidenses y británicos llevarón la muerte y destrucción a Alemania.
En 1945 los pilotos estadounidenses y británicos llevarón la muerte y destrucción a Alemania.
En 1948 viajabán nuevamente rumbo a Berlín, esta vez iban a mantener
viva a la ciudad.
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, Alemania quedó dividida en cuatro
zonas, cada una administrada por un país aliado:
Estados Unidos, Inglaterra,
Francia y la Unión Soviética.
Zonas de ocupación en Alemania, tras la Segunda Guerra Mundial.
Berlín se encontraba rodeada por territorio soviético y, a su vez, había sido dividida en cuatro zonas administradas por los mismos países.
División de Berlín entre
Los Aliados.
Unos tres millones y medio de
berlineses vivían en una ciudad situada a unos 200 kilómetros, detrás de las
líneas rusas.
Berlín estaba unida con Alemania occidental a través de una autopista y
un ferrocarril que atravesaba la zona soviética.
También la ciudad estaba dividida en cuatro sectores: soviético,
estadounidense, británico y francés.
Berlín y Alemania occidental, eran los dos únicos puntos, donde las dos partes, es
decir, las tropas soviéticas y las que procedían de los bloques aliados estaban
en contacto, en otros lugares no existía contacto alguno entre las dos zonas urbanas,
y ese fue unos de los motivos por lo que Berlín se convirtió en un campo de la
batalla fría.
Durante años la existencia de los berlineses había sido muy precaria.
Los alimentos escaseaban y la moneda carecía de valor, el mercado negro era el rey.
Utilizaban todo tipo de productos
para hacer trueques, si un fumador recibía cigarrillos con su tarjeta de racionamiento los cogía gustoso,
porque luego los podía canjear por algo más útil.
Los cigarrillos era la moneda y el mercado negro los mantenía con vida..
El 27 de marzo de 1947, el secretario de asuntos exteriores británicos ,
tenía un plan para Alemania, no le gustaban los alemanes, pero creía que la
recuperación europea dependía de ello: “Tenemos que tratar de reconstruir
Alemania, sobre una base democrática, darle una oportunidad de vivir. Pero al
mismo tiempo, debemos salvaguardar el resto de Europa para evitar que tenga
lugar una agresión como la que hemos vivido”
Maniobras militares soviéticas cerca de Berlín. En 1948, ya se había terminado
hacía mucho, la idílica relación que había existido entre los cuatro aliados.
Los soviéticos querían una Alemania débil y sometida al control de las cuatro
potencias.
Estados unidos, Gran Bretaña y Francia, planeaban secretamente un nuevo
estado alemán en sus zonas de ocupación. Los espías comunicaron este proyecto
al gobernador soviético.
Los antiguos aliados comenzaron a
provocarse mutuamente. Occidente no tenían intensión de moverse de Berlín, pero
sabían que lo soviéticos querían que se marcharán.
Occidente, temían que
Stalin se arriesgara a una guerra para conseguir su objetivo. Los aliados
occidentales planeaban una reforma monetaria , de este modo acabarían con los
especuladores del mercado negro, porque sus antiguas monedas perderían todo
valor.
Los alemanes estarían
atados a occidente.
Nadie comunicó esta iniciativa a los rusos.
Día de la liberación 1948, en la zona soviética Stalin
había unido los partidos comunistas y socialistas. La nueva agrupación el partido
socialistas unificado, salío a la calle
para demostrar su fuerza e incluso había algún ataque contra Winstor entcheide.
El verdadero objetivo de los manifestantes era el ayuntamiento el alemán maruio
stras, que pretendía gobernar a todo Berlín con las directrices occidentales: “Impuetos
excesivos sobre los salarios”
La
mayoría del ayuntamiento de Berlín respaldada por los socialdemócratas y los
cristianos demócratas, creían que con la reforma monetaria, se produciría un
inmediato repunte en la economía. Estaban convencidos de que aumentarían las
inversiones en forma especial de parte
de los empresarios.
Por otro lado los concejales del partido socialista
unificado lo consideraban una amenaza para la única y completa nacionalización
de las propiedades que habían pertenecido a las grandes empresas, a los
criminales de guerra y a los miembros del partido nazi, en definitiva a todos
aquellos que el partido socialista unificado culpaba de haber apoyado a Hitler
en 1933.
El 18 de junio de 1948, los aliados
occidentales dieron el paso creando una nueva moneda para sus zonas de
ocupación: el Deutschemark.
Los alemanes occidentales hicieron filas, para recoger su nueva moneda –
el marco alemán – cada persona podía cambiar 40 marcos, el resto de las monedas
antiguas carecían de valor. Los soviéticos contraatacaron estableciendo su
propia moneda, que insistían sería la única para todo Berlín.
Los soviéticos reaccionaron aplicando una reforma
en su zona en la que incluyeron a la ciudad de Berlín, a la que consideraban
parte integrante de la zona soviética. Cuando los occidentales trataron de
introducir el Deutschemark en sus zonas de ocupación de Berlín.
El poder monetario y político eran sinónimo en aquella
época, por ello era tan importante introducir la moneda occidental, El marco
alemán (Deutschemark), en la zona este de Berlín y evitar que sus
habitantes adoptaran la moneda alemana del este.
Convencidos los aliados occidentales
para poner en circulación el nuevo marco alemán en Alemania oeste. La nueva
moneda que llevaba un sello en forma de B, comenzó a utilizarse en los sectores
occidentales el 23 de junio.
En esos momentos había dos monedas
en la ciudad. Los berlineses descubrieron que en los marcos alemanes
occidentales tenían más valor que los otros. Muchos habitantes de la zona oeste
de Berlín se desplazaban con frecuencia al Berlín este, y por supuesto
compraban todo lo que podían, los marcos de los orientales estaban por lo
general 1 a 5 o 7, es decir, por cada marco occidental equivalía a cinco o
siete marcos orientales.
La introducción de una nueva
moneda occidental, enfureció a los soviéticos, que se reunieron para decidir cuál sería su
siguiente paso:
Bloquear todas las
carreteras principales, ferrocarriles y cualquier vía de conexión entre Berlín
oeste y Alemania occidental.
Las
protestas soviéticas se tornaron en actos: se inició el bloqueo de Berlín.
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